El dolor del cuello es generalmente un dolor temporal causado por un tirón. No obstante, a veces el dolor del cuello puede ser un síntoma de algo más serio. Si a su hijo le duele el cuello, es posible que:
El dolor del cuello es causado generalmente por un tirón de los músculos del cuello. La causa moderna más común el trabajar con la cabeza gacha en forma flexionada. Esta inclinación de la cabeza ocurre con los mensajes de texto o mirando a los dispositivos inteligentes.
Otros desencadenantes son dormir en una posición incómoda, cargado una mochila en forma inapropiada, leído en la cama, estado sentado frente a la computadora durante demasiado tiempo, practicado un deporte o realizado otras actividades similares.
El cuello tieso (cuando su hijo no puede doblarse hacia adelante y tocarse el pecho con la barbilla) puede ser un síntoma inicial de meningitis. En este caso su hijo también tendrá una fiebre. Cuando se sospecha que un niño puede tener meningitis, tiene que ser visto inmediatamente.
Pueden presentarse lesiones serias de la médula espinal como consecuencia de lesiones de saltos acuáticos, lesiones de trampolín, u otros accidentes relacionados con el cuello. Los niños que han sufrido un accidente como éste no deben moverse hasta que una cuadrilla de rescate les aplique un cuello ortopédico o tabla para inmovilizar la columna.
Un cuello torcido no es algo grave y generalmente dura de 1 a 2 semanas.
Dele acetaminofeno (Tylenol) o ibuprofeno (Advil) hasta que su hijo deje de sentir dolor por 24 horas. Esta es la parte más importante del tratamiento porque el dolor de cuello ocasiona espasmo muscular y por lo tanto más dolor, y estos medicamentos pueden detener este ciclo.
Durante los primeros 2 días hágale masajes en los músculos doloridos con una bolsa de agua fría o hielo durante 20 minutos, 4 veces por día. No deje la bolsa sobre la piel por mucho tiempo para evitar congelación.
Después de 2 días, aplique una almohadilla eléctrica o bolsa de agua caliente en la región más dolorosa durante 20 minutos para aliviar el espasmo muscular. Repita cada vez que reaparezca el dolor.
Su hijo puede preferir un collar de espuma para el cuello durante la noche. De esa manera evitará que la cabeza se mueva demasiado mientras duerme. (Puede obtenerse un collar de hule espuma en la farmacia.)
Su hijo debería evitar todos los ejercicios de fortalecimiento del cuello hasta que se sienta completamente bien. No obstante, puede ser útil que haga ejercicios de estiramiento, siempre y cuando no aumenten el dolor.
Si su hijo ha tenido más de un dolor de cuello, generalmente tiene una actividad o costumbre que esfuerza demasiado los músculos o huesos del cuello. Pasar mucho tiempo mirando hacia abajo es la causa más común. Principalmente al enviar mensajes de texto o al usar otros dispositivos móviles. Los adolescentes necesitan descansar o a veces mantener el dispositivo móvil a la altura de los ojos.
Otras actividades que se deben evitar incluyen trabajar con el cuello volteado o doblado hacia atrás, cargar objetos pesados sobre la cabeza, cargar objetos pesados con un brazo (en vez de los dos), pararse de cabeza, deportes de contacto físico o aún jugar a la lucha libre.
Así mismo, mejore la tonicidad de los músculos del cuello con 2 o 3 minutos de ejercicios de estiramiento del cuello diariamente. Algunos ejercicios de elongación que pueden ser útiles son tocarse ambos hombros con la pera, tratar de tocar el hombro con la oreja sin levantar el hombro y mover la cabeza hacia adelante y atrás. No aplique resistencia (fuerza contraria) alguna durante los ejercicios de estiramiento.
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