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PUNTOS CLAVE
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Un lavado nasal con solución salina es un tratamiento que usted puede realizar en el hogar para aliviar los síntomas de la congestión nasal. Los senos nasales detrás de la nariz son espacios huecos que ayudan a calentar y humedecer al aire que respira. Las infecciones y alergias pueden causar que la membrana de los senos nasales se hinche.
La hinchazón y la mucosidad pueden bloquear los senos nasales y provocar dolor. La mucosidad que baja por la garganta puede provocar sibilancia en niños con asma.
La solución salina para el lavado nasal es agua salada. Los lavados nasales con solución salina ayudan a mantener la nariz, los conductos sinusales y la garganta libres de mucosidad. Un aerosol nasal con solución salina no es lo mismo que un lavado nasal con solución salina. El aerosol humedecerá el aire que respira su hijo, pero no limpiará los senos nasales.
Es muy importante usar una solución salina fresca, ya que pueden aparecer bacterias en la solución salina, causando infecciones. Si va a comprar una solución salina, adquiera únicamente paquetes de uso individual.
Para preparar su propia solución salina:
Mezcle 8 onzas de agua (1 taza para medir) con 1/2 cucharadita de sal de mesa no yodada y una pizca de bicarbonato de sodio. Es mejor usar agua tibia destilada, filtrada o agua que ha sido hervida. Tener la mezcla correcta ayuda a prevenir la irritación.
Haga una solución salina fresca cada vez que vaya a realizarse un lavado nasal.
El modo en que deberá realizar los lavados nasales con solución salina dependerá de la edad y el nivel de aceptación del niño.
El equipo que necesitará se compone de:
Aplique 10 gotas (0.6 ml) de solución salina en una fosa nasal cada vez usando un dispensador de plástico. Precaución: Para niños de menos de 1 año, aplique 2 gotas cada vez. Use una perilla para succionar la mucosidad y la solución salina. Repita el procedimiento si es necesario.
Es importante limpiar la perilla a diario. Para limpiarla, aspire agua caliente con jabón al interior de la perilla, agítela y oprima. Enjuáguela bien con agua limpia del grifo y guarde la perilla con la punta hacia abajo para que se vacíe por completo.
Si su hijo sabe sonarse la nariz pero necesita algo de preparación y ayuda, use el método siguiente.
El equipo que necesitará se compone de:
Llene parcialmente la botella tipo aerosol nasal con solución salina. Apriétela suavemente para introducir la solución por una fosa nasal. Haga que su hijo inhale y que se suene la nariz. Repita el proceso con la otra fosa nasal.
Los niños que no necesitan ayuda pueden probar uno de los métodos siguientes.