La caspa es una exfoliación normal de la piel. En la mayor parte de la superficie del cuerpo, las escamillas de piel muerta caen al suelo sin ser advertidas, pero en el pelo pueden acumularse. Este es un proceso normal que ocurre durante toda la vida en toda la superficie del cuerpo. No es contagiosa.
La clave para combatir la caspa es eliminar las escamas con la misma rapidez con que se forman, lavando el cabello diariamente. Un shampoo común generalmente funciona muy bien. Cepille el cabello del niño antes de cada lavado. Con el tiempo, tal vez pueda lavar el cabello un día sí y uno no sin que se acumule la caspa, pero probablemente nunca podrá lavarlo con una frecuencia menor que ésa.
Si el cuero cabelludo está enrojecido e irritado, o las escamas son bastante grasosas, use un champú, mousse o gel anticaspa medicado que contenga sulfuro de selenio. Estos productos no sólo eliminan la caspa, sino que también retardan el proceso de exfoliación de la piel.
El farmacéutico le puede ayudar a elegir un shampoo anticaspa. Este tipo de shampoo se usa de una manera especial: impregne de espuma todo el cabello, espere 3 minutos y enjuague completamente. Haga esto durante 3 días seguidos y luego una vez por semana. U En los días restantes use un champú anticaspa normal.
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